lunes, 23 de abril de 2012

Las Cameron Highlands

Un viaje de diez horas en autobús nos llevó del calor asfixiante de Singapur a las frescas montañas de las Cameron Highlands, situadas al norte de Malasia. Buscábamos el frío y lo encontramos, vaya si lo encontramos!! 


El viaje en el autobús nocturno (salimos a las diez de la noche) prometía ser un viaje de lujo, solamente siete filas de asientos, butacones que se convertían prácticamente en una cama y televisores individuales, pero al contrario de lo que pensábamos el viaje pasó a ser una pesadilla, y me explico, la población de Singapur vive bajo el aire acondicionado constantemente, con temperaturas que harían temblar a un pingüino. Y un poco está bien, pero la temperatura del autobús debía rondar los 12 grados, con unos chorros de aire tan potente que apenas nos permitieron dormir, el frío era terrible… y os preguntaréis: y porque no pedimos que lo quitaran? Pues por la sencilla razón de que parte de la gente que iba en el bus estaba la mar de a gusto, y como para decir nada!! 

Diez horas más tarde y fríos como el hielo llegamos al pueblecito de las Cameron Highlands, un sitio muy pequeño, con unos cuantos hoteles, restaurantes y una pequeña plaza que acoge a todos los autobuses turísticos que hasta allí llegan. Bajamos decididos a tomarnos un café caliente y nos recibió una lluvia fina y fría para nosotros ya desconocida desde que estamos en Singapur. 

Poco tiempo después y con una excursión ya contratada para esa misma mañana llegamos a nuestro hotel, apartado del pueblo y el verdadero tesoro del viaje… Parecía una postal de un puerto de montaña en Suiza!!! La habitación que nos proporcionaron era enorme, muy cómoda, con bañera y ducha y con unas vistas desde la terraza espectaculares. 

La ducha caliente fue un alivio después del frío de toda la noche, nos cambiamos, ahora sí pertrechados con toda la ropa que podíamos y nos fuimos de excursión! Los campos de té de las Cameron Highlands toman por completo el paisaje, junto a ellos campos de fresas y bosques inmensos convierten este lugar en un sitio espectacular. 


Aunque llovía, y el guía nos sugirió ir a tomar un té, optamos por seguir con el plan y dar el paseo por el bosque que seguía en el planning… y nada de un camino asfaltado o al menos ya marcado por antiguas pisadas, seguimos al guía por caminos imposibles, que gracias a la lluvia se habían convertido en auténticos barrizales, pero mereció la pena… la vegetación imponente, las hojas de las plantas inmensas gracias al clima tropical, frutos, plantas medicinales, nos fue mostrando todas y cada una de las cosas que nos íbamos encontrando por el paseo… 

Finalmente, con la visita a la fábrica de té y la tienda, dimos por concluida la visita a los lugares más característicos de las Cameron. Volvimos al hotel donde después de un buen baño caliente nos agasajaron con un té y pasteles.


Paseamos por los alrededores del hotel para aprovechar a sacar unas fotos y posteriormente pudimos ver un precioso atardecer desde la terraza de nuestra habitación. Tras la cena dimos por concluida nuestra visita a las Cameron Highlands, y nos preparamos mentalmente para volver al autobús a la mañana siguiente…

Sorprendentemente a la vuelta lo malo no fue el aire acondicionado, que estaba mejor regulado, sino las curvas del camino de vuelta a la autopista, durante dos horas el camino fue de lo más tortuoso para, los que como en mi caso, nos mareamos con facilidad. 

Conclusión, después de este post la pregunta que os haréis es ¿merece la pena visitar las Cameron Highlands? Por supuestísimo, el paisaje es espectacular. Ahora bien, para quien decida venir hasta aquí, ahí van unos consejos: Ropa de abrigo, botas, si decidís ir en autobús en lugar de avión una manta y por último, una caja de biodraminas para llevar con dignidad las curvas del viaje. Y con esto el viaje será estupendo y lo disfrutaréis un montón!!

2 comentarios:

  1. Espero que la refrigeración os haya servido pa una temporadina.
    A mi no me lleves a pasar frío, eh? ya sabes, en caso de calorino excesivo, vamos al bar de hielo! jajajaja
    Que sigan estos posts maravillosos!!!
    Besin graaaandeeee!!!

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  2. Es una pena que no hayáis podido embotellar nada de ese fresco del que hacéis referencia. No obstante es bueno que el cuerpo se habitúe a todo tipo de climas. Por otra parte, parece haber sido un viaje muy prometedor para los visitantes.
    Seguir así y podréis escribir vuestra propia guía de viajes.......
    Besos y un fuerte abrazo.
    Nota: Guardar algún viaje para próximos viajeros,je,je.....

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